Castillo de Niebla

El castillo de Niebla, situado en Huelva (Andalucía), es el resultado de distintas fases constructivas. Su antiguedad se remonta a la época romana. Son hoy visibles lienzos de fábrica musulmana y dos puertas, una de ellas cegada y la otra es ahora utilizada como puerta principal del castillo. Los restos de la reconstrucción cristiana son los más visibles en la mampostería.

El castillo posee dos recintos. El primero de ellos rectangular con barbacana y torres cilíndricas, mientras que el segundo, presenta diez torres cuadradas de robusta construcción. Este recinto interior se halla dividido en dos mitades por una pared central que lo atraviesa que posiblemente tuviera una finalidad divisoria: la zona occidental estaría dedicada a caballerizas, almacenes y armería, mientras que la oriental contendría las dependencias domésticas.

La zona sobre la que se asienta el castillo, a conocido un poblamiento continuado desde la antiguedad. Los musulmanes la denominaron "Lebla", nombre que ue sustituido cuando fue conquistado por tropas cristianas. En 1262, Alfonso X tomó en su poder esta fortaleza y en el S.XV fue llamado el Castillo de "Niebla". En los años siguientes el castillo pasó a ser propiedad de los duques de Medina-Sidonia, para pasar más tarde a la casa ducal de Medinaceli. Al deterioro del castillo no estuvo ajeno las tropas francesas que volaron la fortaleza en 1812. En 1932, el Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes llevó a cabo una restauración del castillo. En la actualidad el castillo puede ser visitado por el público.

El castillo y la villa de Niebla vieron modificado su estatus en 1368. Su titular era Juan Alonso de Bizmanos que recibió el título del Conde de Niebla por deseo del Monarca Enrique II. Fue un cambio importante para la vida del castillo tanto interna como económica.

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