Una de las fiestas españolas más importantes, se celebra en la ciudad de Valencia, España, del 12 al 19 de marzo.
Sus orígenes se remontan a las hogueras paganas que hacían los valencianos en homenage al dios Saturno para festejar el inicio de la primavera. En el siglo XVI los carpinteros del barrio del Carmen celebrarían el final del invierno y el día de su patrona, san José, quemando en hogueras los restos inservibles de la madera utiliza a lo largo del año.
En la actualidad, y durante todo el año, los valencianos se dedican a elaborar las "fallas": una o dos figuras gigantescas entorno a las cuales se desarrolla un argumento satírico y mordaz gracias a los típicos "ninots", figuras caricaturescas de políticos, artistas, toreros o gente de actualidad. los ninots se modelan primero en barro, después se sacan sus moldes el alabastro, se consigue en vaciado de cartón y se decoran con pintura plástica. Aproximadamente 370 fallas grandes y 368 infantiles se instalan la noche del 15 de marzo en plaza y cruces de calles, cada una con su "comisión fallera" y su "Fallera mayor". Las grandes figuras pueden llegar a alcanzar una altura de 20 metros y un peso que oscila entre las 8 y 10 toneladas.
Entre los actos más peculiares hay que destacar: la cabalgata del ninot, durante la cual las comparsas se disfrazan y llegan a cabo pantomimas de fuerte crítica social y política; la cabalgata del reino el la cual participan carrozas de otros pueblos de la provincia que ofrecen sus productos, sus bailes típicos y sus rondallas; la ofrenda de flores a la Virgen de los Desamparados y, por último, la nit de foc, noche de fuego a la que se le ofrecen las fallas, una ceremonia de despedida en la cual la ciudad queda envuelta en llamas y su cielo cubierto de fuegos artificiales.
la nit de foc o noche de fuego es la ceremonia de despedida de las
fallas valencianas. En una de las esquinas del casco (barrio) antiguo
de la ciudad, encontramos una de las fallas que arderan esa noche:
varios ninots cantan alegres frente a un gran abanico pintado con la
barraca valenciana; desde lo alto asusta la cara de una enorme figura
que crea una divertida escena.